
Permanecen los significantes destellos de luz
Que al amanecer fusilan todo sinsabor.
Vacilan en otros lugares, en otro tiempo,
Las tormentas
Un sigiloso recuerdo
Respeta el gris acontecer de tu vileza dormida.
Fueron colillas las que enturbiaron
Tu ansioso tiempo mientras que apagabas otro y …
Y otro de tus cigarrillos …
Añorando mirar hacia el lado opuesto.
Desde entonces…
A los bosques los llamaron desiertos.
A los gentiles prados:
Polvo viejo y derrotado.
Mirar siempre hacia la luz, querida amiga.
Saludos.