MÁS ALLÁ DE LOS SUEÑOS
El mar vencía a la noche en su silencio.
No agonizaban los sueños,
ni las cabezas cortadas en jubilosa danza.
No paseaban ya las gigantes hormigas llevándose los frutos que caían con el viento.
No.
No había ni tormentas ni vapor,
solo ramas que descendían
con una brisa a su favor.
No quedaría tu piel posando sin armas ni pecados,
más que los tuyos, mujer.
Ansiabas la oscuridad para cerrar los ojos.
La voz solo latidos.
Tu risa una alargada sombra.
Si pudieras…
Besar el jardín más amable de la esperanza oliendo a madera tejiéndose …
Y su único destino ahora…
cerrar su cama y poder partir a la mañana.
Eva necesita una playa en su sigilosa muerte, donde reine la luz,
donde el azul obedezca al miedo atado y dominado por las olas;
donde el amor no invente
sin razón, algún dolor y,
construya placeres escondidos en la cueva
de los instintos.
Se abre la imagen al deseo.
Si supieras… entender su gozo,
sorprender su reposo.
Su alma no quedaría oculta
ni los sueños volverían a dormir.
Ahora desvestía al día un espacio de fuga
y más amaneceres de huida,
colmados de estrellas,
que del pasado desvelan calor.
Es verano y calla el sol.

«Es verano y calla el sol»
No estás para tormentas, Ja ja
Besos
Eva necesita claridad