He decidido morir estando lejos
He perdido la oportunidad de estar de nuevo ahí
Contigo
La naturaleza me golpea más hoy que otras mañanas
Sale a mi encuentro la inquietud con esa pieza
y suena.
Quisiera acariciar hipótesis de otros tiempos
Advierte el viento y corro, solo está…
Motivo de agonía sin silencio.
He decidido que mi muerte fuera tu recuerdo.
He perdido toda posibilidad de lamentarme
Sin ti,
Simulando una razón.
En Abril
*
Cuando tú despojado de armaduras
Brillabas en la noche
Como aquella que era tu estrella
Como aquel que era su impulso…
El encuentro tuvo lugar.
Ella cruzó sus brazos a la altura del corazón
Portando una espada en cada mano
Sólo quiso ser testigo de éste que era su sueño
Sólo había conocido hasta entonces desconsuelo.
Aquel instante se hizo eterno.
Él mudaba su piel con cada cambio de estación
Ella detenía cada imagen deshojando una flor
Un día en abril, el jardín cubierto de nieve
Una noche el marfil teñido de oscura fiebre.
El caballo paralizado agotando un tiempo que se rinde.
Descalza, ahora para él, brinda una copa
Con ilusión mirando al cielo cada noche.
Él es primavera de un sueño que nunca llega
Ella, en abril, el jardín que el frío ciega.
Me conformé con mi aquietar
ese
consuelo
ese...
lugar de mi delirante ilusión
aquella...
en mi reposo
permitiendo hacer el amor con los ojos cerrados... soñando
este...
evadida y desvaneciendo
mi aburrido espíritu deja de buscarte
poesía para sostener
lo lamento, salgo de mí y
muero.
Quema la luz aún.
(Y tu silueta brilla más que nunca).
Me limitan las fuerzas descontroladas que he estado vertiendo sobre una creencia desbocada de la verdad; una ficticia ida de dulces esparanzas se instala para mí.
Una bestia que protegí con mis manos y cuidé durante años.
Amargo es el negro. Todo es un riesgo ahora.
EL PESO Y EL TIEMPO
Con los años...
Por los lunáticos y hambrientos espacios
Que las nostalgias
Con rabia
A los espejos vencían sin miedos.
Con los años...
Por las aguas vuelan los horizontes
Y por el cielo nadaban las nieblas
Sin el mutismo del viento en reposo.
Con los días...
Por los minutos que fueron horas y
Por instantes que serían eternos
LOS QUE POBLARON LA TIERRA ANTES QUE NOSOTROS
TAMPOCO ESTABAN SOLOS…
SI LOS ÁRBOLES ME OYERAN
Música creada con IA
Límites del sistema
Tras el largo plazo
Se agotan los puntos y aparte
Las comas al compás incesante.
Puntos infinitos.
Las fechas y los horarios
Más de un siglo
Esperando…
Los relojes cambian
Las agujas marcan
TIC TAC
SE VAN
NUEVO POEMARIO
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¡Cómo duele el sonido que no se estima!
Duelen las altas colinas sin su lechosa corona
¡Cómo duele el campo que no se riega!
Duelen los hollejos que se desprecian por su color intenso
¡Cómo duele el sabor de tu beso ausente!
¿Duele a carnoso y frio?
¿O tal vez a gesto inconmovible?
Almudena Grandes
Me olvido de mi.
Muérdeme, que la tarde no tiene vino para tomar
Bésame,
Sácame del aburrimiento y la incomprensión
Tiende tus hilos de angustia, que ya
brilla el mar con toda su delicadeza
Cuando canta,
cuando rompe su movimiento incesante ante tus ojos.
Aposté y perdí.
Me pierdo y medito
Medito
y me olvido de mi.
La estación del amor esta vez me abandonó tajantemente.
PLUMA Y ALAS
Sed que oculta pavor
Pluma que cae de tus alas
Derroche de apetitos tras la ventana
Asareando y oscureciendo mi hálito
Ya mortal
Aleteo que se apaga
Cierzo y rumbo
Rumbo y silencio
Sacude su burla
Estampa el tedio
¡Deja tu pluma en mi ventana!
Tu voz que no duerme
Tu rechazo y mi angustia
Sin rastro de olor
Ni sabores
Ahora, yo si
Gracias